¿Por qué mi hijo camina de puntitas? Posibles causas y tratamientos

La imagen de un niño caminando sobre la punta de los pies nos transmite la alegría y despreocupación de la niñez. Suele ser una costumbre sin mayores complicaciones, pero existen algunas dolencias y enfermedades de las que también puede ser un síntoma.


Los especialistas en pediatría y podología indican que caminar de puntitas ocasionalmente es normal en un niño hasta los cinco o seis años de edad. Pero si esa costumbre persiste es necesaria una mayor observación, ya que puede ser señal de algo distinto, además de afectar la posición del cuerpo y la espalda.


Autismo

Lo primero que pensamos al leer esta palabra es "a mi hijo no". Pero toma en cuenta que según algunos estudios, caminar en punta de pies está relacionado con desórdenes psiquiátricos y problemas de desarrollo. Según estas investigaciones, el 40% de niños autistas mostraban el hábito de caminar de puntitas. A este desorden psicológico se asocia muchas veces una especial sensibilidad, por la cual los niños evitan lo más posible el contacto con el piso.


Distrofia muscular

Otra posibilidad son los factores genéticos o un mal desarrollo de los músculos y tendones de los pies y la pantorrilla. La dolencia más común en estos casos son los talones de aquiles cortos o rígidos, que pueden producir mucha molestia y hasta dolor cuando se intenta colocar las plantas de los pies sobre el piso.


Trastorno de la integración sensorial

La integración sensorial es una función cerebral básica para la sobrevivencia. Nos permite organizar los diversos estímulos que recibimos por los sentidos y desde nuestro interior y luego integrarlos todos para manejar y utilizar el cuerpo de manera natural y eficiente. Algunos niños no pueden integrar bien estos estímulos, generándose un trastorno en su forma de andar.






Síndrome de Charcot-Marie-Tooth

Una enfermedad rara que se acentúa luego de la niñez. De pequeños puede presentar, entre otro síntomas, el de caminar con la punta de los pies. Es una enfermedad de progresión lenta en la que la planta de los pies se arquea y se dificultar estar de pie, ademas de producir entumecimientos y pérdida de masa muscular.


Nervios, inseguridad

En el mundo del desarrollo emocional, la ansiedad y el nerviosismo también son considerados causas frecuentes de los pies en punta. La explicación es que el cuerpo del niño se tensa al buscar desesperadamente llamar la atención y asume una postura lo más alta posible, buscando ser percibido. Por eso se para en la punta de sus pies.

Hay otras muchas enfermedades de las que se sospecha cierta influencia en el caminar con la punta de los pies, como el síndrome X Frágil, un mal genético que incluye hiperelasticidad de las articulaciones. Sin embargo, aun no se ha establecido una relación directa.

Otro caso es el de los espasmos infantiles, un tipo de convulsiones por los cuales los niños mueven la cabeza o encogen los hombros. También pueden generar flexiones en brazos y pies. Se deben a lesiones cerebrales que pueden aparecer desde el embarazo hasta los primeros días de nacido.


Tratamientos

Son muy variados y avanzados, y deben ir de acuerdo al diagnóstico del podólogo. Las indicaciones dependerán de la naturaleza de la dolencia o enfermedad que la genera.

Accesorios ortopédicos: existe una gran variedad de accesorios recomendados por el ortopedista o podólogo para corregirlo. Uno de los más conocidos son los tirantes y plantillas adaptables a las piernas, que ayudarán a tu hijo a corregir su posición.

Terapia física: masajes, fisioterapias, ejercicios. Existen diversos programas de rehabilitación diseñados para estos casos en los diversos hospitales y clínicas especializados.

Terapia relacionada con problemas mentales: el tratamiento será totalmente distinto, centrándose en la estimulación de la atención e interacción con su entorno a través de técnicas especializadas. Cuanto más pronto si inicien estos tratamientos, más se reducirán los síntomas.

Cirugía: último recurso, generalmente aplicado en tendones de aquiles cortos. La operación es simple pero requiere dos meses de recuperación.

Más información en Mayo Clinic.



Comentarios

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  1. Anónimo2:26 p.m.

    Falta algo DEMASIADO importante en este preocupante post, lo que todos los educadores aprendemos a decir, no se pueden sacar conclusiones que puede ser uno u otro de los listados, primero que cualquier cosa un médico especialista tiene que descartar cualquier tipo de problema antes de ponernos a mirar una lista y preocuparse cada vez más. Lo importante y principal es, si tu niño está caminando de una manera que no te parece "normal" que no es la esperable para su edad, sí puede ser una serie de cosas, PUEDE SER, lo primerísimo y más importante, ante la duda, consultar a un especialista de carne y hueso que revise al niño

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  2. Anónimo4:36 p.m.

    MI NIÑO YA TIENE 11 AÑOS Y TODAVIA CAMINA DE PUNTITAS... TODO MUNDO ME IGNORABA, EL PODOLOGO SOLO LE PONIA PLANTILLAS Y ZAPATOS QUE LOS HACIA COMO DE PAYASO NO FUNCIONABAN NI FUNCIONARON. SIGUE CAMINANDO IGUAL.

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