¿Ahorro o un buen colegio? El manejo de la economía familiar en una crisis

La vida esta llena de altas y bajas. No podemos esperar que siempre este todo bien en la economía familiar. Pero cuando llegan los momentos difíciles es cuando nuestra capacidad de ahorro se pone a prueba. Mantener a los hijos en el colegio o cambiarlos a otro más económico es una de la decisiones a tomar.


Sentémonos y veamos la situación con calma. Nos hemos acostumbrado a un estilo de vida y a un nivel de gastos de los cuales nos es muy difícil prescindir. Pero cuando nos damos cuenta de que está en riesgo la educación de nuestros hijos, es necesario ser realistas y objetivos.

¿Hay algo que se pueda hacer para evitar cambiarlo de colegio por razones económicas? La respuesta es sí, hay muchas cosas que se pueden hacer antes de llegar a eso, entre ellas las siguientes:

Ahorro en servicios del hogar

La electricidad, el agua, el teléfono. En todos ellos se puede hacer muchas cosas para no gastar de más. En el caso del servicio eléctrico cambiar bombillas de luz por ahorradoras, adquirir un reloj para el calentador de agua y que caliente solo cuando vayamos a bañarnos. Racionar el uso del calefactor de la casa.

Accesorios tecnológicos

Cambiar a planes más económicos en telefonía móvil e internet. Si no son imprescindibles - por ejemplo como herramientas de trabajo - también puedes considerar el anularlos. Olvídate de comprarles ipads o tablets a tus hijos, por lo menos mientras dure la crisis. Limita el uso de internet para juego.

Uso del coche

Cuando tenemos automóvil nos acostumbramos a hacer todo con él, hasta ir a comprar a la bodega de la esquina. Limita el uso de tu auto solo a distancias razonablemente lejanas y usa la bicicleta más seguido. Considera la posibilidad de usar el transporte público para llevar a tu hijo al colegio de manera interdiaria o total.





Comida rápida y diversión

Si era un hábito salir a comer en familia dos o tres veces al mes, pues que sea una. Canjea las otras por salidas al parque o espectáculos públicos de ingreso libre. También sería recomendable que pospongas ese viaje familiar hasta que las cosas mejoren.

Reuniones y gustitos

Limita esos reencuentros con amigos o amigas y reuniones en el bar después de la oficina. Además, los tiempos de crisis son un buen momento para dejar de fumar y tomar licor, si es que aún lo haces teniendo hijos que se preocupan por tu salud. Será un ahorro tal vez mínimo, pero una señal muy importante a tu familia sobre tus verdaderas prioridades.

En el colegio

Solicita apoyo económico en el colegio, con la reclasificación de las mensualidades que pagas por tu hijo. Cada colegio tiene sus requisitos y cronogramas. Solicita la información con tiempo y cuando a su vez te la pidan, di siempre la verdad.

Reflexiona

Finalmente, tómate un tiempo, recorre tu casa y reflexiona en qué otras cosas puedes ahorrar. Secadora de ropa y de cabello, compra de menú todo los días para almorzar, comida del perro, tarjetas de crédito.

Siempre hay algo en lo que se puede ahorrar más. Incluso si veías que la educación que le daban a tu hijo en su colegio - además de ser caro - no era buena, este es un excelente pretexto para cambiarlo a un colegio bueno y más económico. Ten por seguro que los hay.

Las crisis económicas nos obligan a mirarnos de frente al espejo y cuestionarnos nuestro estilo de vida familiar. Aprovecha esta oportunidad para hacerlo y evitarás que tu hijo pierda una buena educación.


Imagen: Josh Grenier en Flickr


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