Secretos para hacer bananas congeladas en paleta

Este es un postre ideal para hacer con los niños. La receta básica para hacer paletas de plátanos congelados incluye plátanos y leche condensada. Es tan fácil que puedes hacerlo con tu hijo. Sólo hay que pelar los plátanos, introducirles una paleta de madera para helados con mucho cuidado y llevarlos al congelador de dos a tres horas. Una vez afuera, puedes disfrutarlos remojando en leche condensada.


Pero existen algunos trucos que te pueden servir para que esta receta te salga mucho mejor. Lo primero es saber que cuando los bananos son congelados en tu refrigerador, el proceso es más lento que cuando se hace industrialmente. Esto provoca que se formen cristales de hielo sobre los plátanos y que se "quemen" más de lo normal por efecto del frío.


Si lo que vas a hacer es una deliciosa variación de las bananas congeladas, sumergiéndolas en chocolate caliente con maní y galletas partidas o con nutella derretida y coco te recomendamos que, después de congelarlos y antes de verterles el chocolate, retires el hielo que puedan llevar encima. Así evitarás que el chocolate se suelte y no se adhiera al plátano.





Otro secretito para que no se forme hielo sobre los plátanos es no meterlos a congelar dentro de bolsas plásticas, pues estas bolsas condensarían aún más la humedad sobre ellos. Basta con colocarlos sobre bandejas de vidrio refractario resistentes al frío.

Si usas platanitos enanos o "bizcochitos" cada uno irá ensartado en una paleta. Pero si usas el plátano normal o "de seda", es mejor que los partas en dos y que cada mitad sea una porción, para evitar que se deshagan.


¿Al final te quedaron algunas bananas en el congelador? Puedes hacer un riquísimo banana frappé con ellas!

Comentarios